Facility Management es una disciplina relativamente nueva que comprende diversas áreas para asegurar y gestionar el mejor funcionamiento de los inmuebles y sus servicios agrupados, mediante la combinación de personas, espacios, procesos y las tecnologías propias de los inmuebles.
Con edificaciones corporativas cada vez más complejas y tecnológicas, se consolida un perfil especializado en edificación, como por ejemplo arquitectos e ingenieros, pero que también incluye otras especialidades.
Antiguamente, la administración y gestión de edificios se ha asociado a los servicios de limpieza, el correo y la seguridad. Sin embargo, recientemente se ha desarrollado el concepto de Facility Manager, una nueva adaptación de esta práctica que incluye puestos y responsabilidades más complejas.
Esta profesión empezó a ser reconocida hace relativamente poco, empezando a tener importancia en organizaciones líderes del mercado. Según la normativa europea EN 15221/1, el Facility Management se define como “la gestión de inmuebles y servicios soporte”.
El Facility Manager tiene como funciones, entre otras, el desarrollo y perfeccionamiento de las estrategias corporativas respecto a los recursos inmobiliarios, renovación y reubicación, políticas de optimización de áreas, coordinación de los proyectos de construcción, contratación de todos los productos y servicios afines con el correcto funcionamiento de las instalaciones, conservación y mantenimiento de instalaciones e ingeniería.
Un Facility Manager es el encargado de asegurar el correcto funcionamiento de las instalaciones y la logística en el marco laboral de una empresa, ya sea un edificio de oficinas o una planta productiva.
Se trata de un «gran administrador» que se ocupa de gestionar el día a día alrededor del espacio de trabajo, tanto a nivel hard (como por ejemplo asegurar el correcto mantenimiento y funcionamiento de todos los aires acondicionados) como a nivel soft (como podría ser garantizar la limpieza de todas las oficinas).
LAS FUNCIONES DEL FACILITY MANAGEMENT son clave dentro de una compañía, algunas funciones más concretas podrían ser:
- Control de maquinarias:
Registro y seguimiento del funcionamiento de ascensores, bombas, calderas… - Supervisión de equipos:
Supervisión de los trabajos y tareas desarrollados en cada equipo. - Gestión de proveedores:
Contactarse con proveedores y controlar su coordinación mensual. - Gestión de recursos inmobiliarios:
Optimizar los espacios y gestión de los proyectos de construcción y renovación de la compañía. - Contratación de productos y servicios:
Atestiguar el correcto funcionamiento de las instalaciones y su mantenimiento mediante la adquisición de productos y servicios. - Monitorear los sistemas:
Realizar una revisión periódica de las instalaciones y coordinar las manutenciones. Pueden utilizar un software para un control más preciso. - Resolución de problemas:
Un buen Facility de responder incluso a problemas medioambientales, de salud y seguridad. Asimismo, debe anticiparse a las necesidades de todas las áreas del edificio. - Asegurar el cumplimiento de normas:
Cuidar por que el edificio cumpla con las regulaciones y normas.
BENEFICIOS DE CONTAR CON UN FACILITY MANAGER EN TU EMPRESA
Cuando implementado de forma correcta, el Facility Management representa un importante
Ahorro económico para las compañías y una garantía de que el edificio, mantendrá un buen funcionamiento, en todos los aspectosLa presencia de un Facility Manager, podría conseguir a la compañía un descenso de costes de entre un 10% y un 30%, además de asegurarle la calidad del servicio con proveedores solventes.
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